Juan Carlos Díaz Lorenzo

A mediados de la década de los años sesenta del siglo XX, la Compañía Anónima Venezolana de Navegación (CAVN) emprendió un plan de renovación de flota que se materializó en la construcción de nuevos buques “multipurpose”, contratados en astilleros europeos y japoneses. Uno de aquellos nuevos cargueros de línea recibió el nombre de “Aragua”, en homenaje al Estado de su mismo nombre, situado en el norte centro del país y conocido como el cruce de todos los caminos de Venezuela.

El buque "Aragua" era un carguero de línea muy en boga en la época

Construcción número 56 de los astilleros Oy Navire, en Naantali (Finlandia), entró en servicio en 1978 y fue inscrito en la matrícula naval de La Guaira. Era un buque de 10.308 toneladas brutas, 6.159 toneladas netas y 14.580 toneladas de peso muerto, siendo sus principales dimensiones 159,26 m de eslora total -145 m entre perpendiculares-, 22 m de manga, 12,60 m de puntal y 8,30 m de calado máximo. Propulsado por un motor Sulzer –fabricado, bajo licencia, por la firma Wärtsila en sus talleres de Helsinki-, de 12.000 caballos de potencia y una velocidad de 17 nudos.

Era un barco de gran capacidad de carga general, con grúas y puntales

Disponía de una gran capacidad de carga en cuatro bodegas –tres a proa de la superestructura y una a popa-, dotadas de siete escotillas y grúas hidráulicas y puntales para las operaciones de carga y/o descarga. Sobre cubierta podía transportar 140 TEUS. Código IMO 7504691.

En junio de 1994 el buque fue vendido a la sociedad panameña Mikeship y rebautizado “Michael R”. Así transcurrirían otros seis años, navegando en tráficos “tramp”. Después de una temporada fondeado en Durban, en noviembre de 2000 arribó a Mumbai (India), donde se procedió a su desguace.

Rebautizado "Michel R", navegando en aguas de Brasil

En su segunda y última etapa transcurrieron seis años

Fotos: Frits Olinga y Rogério Cordeiro (shipspotting.com)